Ya no sé cuánto tiempo hace que no escribo en el blog, la verdad es que últimamente no me ha apetecido mucho escribir y tampoco sabía qué escribir pero supongo que eso pasa de vez en cuando.
Hace unos 3 años que iba buscando un puzzle de una de mis series favoritas de anime, One Piece, cada cierto tiempo busco si está disponible y lo puedo comprar y, hace un mes, conseguí comprarlo; me hizo mucha ilusión poder hacerme con él después de tanto tiempo y la verdad es que cuando lo compré, no podía esperar a que me llegara, las 3 semanas que tardó en llegar fueron eternas.
Una vez que lo tuve, no lo empecé a montar en seguida porque, como me conozco, sabía que iba a tardar un plis plas en montarlo pero, un sábado, que estaba en casa y estaba cansada de la rutina, me puse a montarlo. Como siempre, empecé por el borde del puzzle que es lo más fácil de montar porque las piezas las puedes localizar más fácilmente que el resto y el resultado fue que lo monté en una hora más o menos, perdí más tiempo en encontrar las piezas que en montarlas. La foto no es muy buena porque la hice con el móvil pero por lo menos podéis ver cómo iba quedando.
