Bueno, como muchos sabéis, hace unos meses me operaron (otra vez) y he estado cuatro meses de baja. Para una persona como yo que soy de culo inquieto, ha resultado ser bastante estresante tener que permanecer prácticamente reclutada en casa. Menos mal que tengo unos amigos estupendos que han ido visitándome en los momentos que han podido y mi "soledad" en casa ha sido mucho más llevadera.
Pues bien, este agosto, cuando vinieron mis padres a verme durante unos días, fuimos a casa de mi hermana a pasar el día y, mientras que mi hermana y mi madre estaban disfrutando de una buena puesta al día con la afición de mi hermana y, mi padre y mi cuñado montaban un mueble para su cocina, como yo no podía moverme por mi reciente operación, mi cuñado me puso un juego en su Xbox y me puse a jugar durante toda la mañana hasta la hora de comer. Pues bien, ahora mi "colección" de juegos, si es que se le puede llamar colección porque realmente hasta hace bien poco no es que fuera demasiado friki de los videojuegos, ha aumentado, y no solo en juegos, sino también en consolas. Me he comprado la Xbox 360, ahora tengo tres consolas distintas, la Playstation 2 slim, la NintendoDS XL, y la Xbox 360.